Praga (2ª etapa)

 Llegada a Praga, a la estación de tren, y lo primero es cambiar de moneda porque entonces no había euros, no se ahora, y comprar billetes de metro o bono para moverte por la ciudad, de aquí a la estación de metro que está en la misma estación y a la parada del hotel, en nuestro caso, el Corinthia Panorama, un poco alejado del centro pero junto a una parada de metro (Vysehrad), el mejor hotel del viaje, con diferencia, con desayunos espectaculares, cada día cogíamos el metro y al centro, a la parada de la plaza Wenceslao.

  Día 1. Sales de la parada del metro y te encuentras en una plaza espectacular rodeado de edificios de época, a tus espaldas el Museo Nacional presidiendo la plaza y en el centro de ella, la estatua de San Wenceslao a caballo, pasas junto a tranvías de otra época, pero funcionando, y te acercas al final de la plaza que desemboca en una calle ancha peatonal, repleta de tiendas de moda, vamos hacia la derecha a la torre negra, de las cuales hay muchas por la ciudad, esta es la Puerta de la Torre de la Pólvora, y pasamos por debajo de ella, vamos hacia la plaza central de Praga, muy grande y espaciosa, donde se ubica la catedral de San Nicolás, el ayuntamiento de la ciudad vieja, el reloj astronómico, la estatua de jan hus, palacios, bares y restaurantes alrededor, y mucho movimiento de personal, tanto turista como de la capital.

Plaza Wenceslao, al fondo el Museo Nacional

Plaza Central de Praga, Ayuntamiento.

  De aquí y pasando junto al reloj astronómico, uno de los mayores y más antiguos, seguimos hacia el puente de Carlos IV, un monumento en sí mismo, y con unas vistas sobre el río Ultava y la parte antigua de Praga al otro lado del puente, y en la cima de la colina admiramos el castillo de San Vito, y el castillo de Praga,  imponente en lo alto, y admirando la ciudad a sus pies.

Final del puente de San Carlos y entrada a la ciudad vieja de Praga

  Este día toca a su fin, ya que entre el viaje y la instalación en el hotel, nos queda poco del día, volvemos al hotel, pasando antes por la plaza Central de Praga de noche que es espectacular con sus edificios emblemáticos iluminados, una gozada.

  Día 2. Salimos a la misma plaza pero ahora vamos hacia la derecha,a la Sinagoga Jerusalem, y la torre junto a San Enrique, y el palacio de Harrach, subimos desde ella hay grandes vistas de la ciudad, de aquí cogemos un tranvía de los rojos y vamos al Ayuntamiento de la ciudad nueva, frente a una plaza y un gran parque, subimos a una nueva torre, está parece más alta que la anterior, estupendas vistas y poca gente, a la salida vamos hacia el rio, justo frente al edificio de Ginger y Fred, en el puente de Jirasek, que lo cruzamos para ver el panorama de edificios junto al río alineados y cada uno de un color, muy bonito, subimos de nuevo junto al margen del río hasta el edificio del Teatro Nacional. Continuamos hasta cruzar el río por el puente de Manex, elque está más al norte del de Carlos IV.

Edificio Ginger y Fred

Puente de Carlos IV y San Vito en lo alto a la izquierda.

  Una vez al otro lado de la ciudad visitamos los jardines de Wallestein, con pavos reales, y gran afluencia de público, de aquí subimos unas escaleras que se hacen eternas para llegar al Castillo de Praga, fantástica entrada, que da a un patio y dentro la Catedral de San Vito en el recinto del Castillo, aquí visitamos la Catedral, la subida a la torre ha cerrado y volveremos al día siguiente, en los alrededores, hay tiendas de artesanos, iglesias donde hay conciertos de música, palacios, etc, al otro lado de la catedral salimos por el Jardín Real, a esté lado vemos que hay un tranvía que sube hasta lo alto por el otro lado, que usaremos al día siguiente para ahorrarnos la subida de las escaleras. Vuelta al hotel.

  Día 3. Vamos al pequeño centro comercial que hay al final de la plaza de San Wenceslao a la izquierda, donde hay una curiosa escultura, de un rey montando a su caballo, pero esté está del revés, alguna mala pasada le jugaría. Volvemos a la plaza central y nos dirigimos hacia el antiguo barrio judío, con la sinagoga española y la nueva sinagoga vieja, una de las más antiguas de Europa, así como su cementerio, volvemos hacia el puente de Carlos IV y subimos la torre del puente de la ciudad Vieja, en el mismo puente. Tenemos unas vistas del puente con sus esculturas y puestos de pinturas, turistas,etc.

Puente de Carlos IV y San Vito arriba a la derecha

Escultura curiosa en un Centro Comercial.

 
   Cruzamos el río, en el otro lado de la ciudad, visitamos los jardines de Vrtba, jardines en terraza, espectaculares, vamos a la iglesia donde está el niño Jesús de Praga, en la Iglesia de la Ntra. Sra. de la Victoria, cerca de la subida en funicular a la Torre Eiffell en miniatura que tienen en Praga y hace las veces de mirador, una pena llueve, y las vistas no son las mejores, cogemos el tranvía y subimos la cuesta del otro lado del Castillo de Praga para bajar junto a la catedral, ahora sí, subimos a lo más alto de la catedral, una de las subidas más duras de todas las torres y catedrales que recuerdo. Vistas del río y toda Praga magníficas. Una gozada. De vuelta a la estación de tren para ver las salidas del día siguiente a Viena y vuelta al hotel.
  Ciudad encantadora, y no te cansas de pasear por sus calles, siempre encuentras algo que admirar o donde perderte. Para volver algún día.
  Saludos y buen viaje.