lunes, 9 de septiembre de 2013

Camino del Cid. De Atienza a Calatayud. Tres días pedaleando.



  Esta es una ruta que sigue el camino del Cid, y del cantar del Mio Cid, por tierras castellanas, en este caso, desde Atienza a Calatayud, se puede conseguir todo tipo de información, mapas, tracks, puntos de sellado del pasaporte, alojamiento, etc en la web del consorcio del Camino del Cid.

  Nuestro propósito era hacerlo en 3 días, ya que no disponíamos de más en esta ocasión, y dividimos la ruta en tres etapas, de una media de 90 km aproximadamente sin muchas subidas importantes, es más la mayoría de días bajamos más que subimos, el camino la mayoría por caminos rurales y muy poco por asfalto, se encuentra en muy buenas condiciones, y la señalización, salvo alguna excepción es muy buena.

  Previamente y a través de la web pedí un pasaporte, del camino del Cid, en el que en Ayuntamientos, oficinas de turismo y bares o casas rurales y hoteles te van sellando a su paso, para tener un recuerdo, es curioso, cada pueblo le pone su símbolo más característico.

  Para llegar a Atienza vamos en coche con las dos bicicletas atrás hasta Atienza llegamos el día anterior sobre las 21 h de la noche, desembarcamos todos los trastos, nos acomodamos en el Hostal Restaurante Alfonso VIII, tiene un parking para dejar bicis muy amplio, y podemos cenar en el mismo hostal, un surtido de embutidos, patatas bravas, calamares y 4 tercios 28€, todo bueno menos el servicio muy lento, están en fiestas y los camareros no dan abasto y encima no toman nota.
Atienza, en lo alto su castillo




 Día 1. Atienza-Sigüenza. 92 km,

  Iniciamos la ruta atravesando el pueblo para ver si nos sellan el pasaporte, pero la oficina de turismo está cerrada y el Hotel restaurante que sella también, por fiestas.
  Al llegar al primer cruce como el camino del Cid, no es ciclable al 100% optamos por la alternativa por carretera hasta Robledo de Corpes, unos 15 km primero de bajada y después de cruzar el río Cañamares de subida.

Río Cañamares

  Una vez pasado Robledo de Corpes iniciamos un paseo por caminos rurales de buen firme pasamos por un Pinar de enormes dimensiones donde no se ve ni un alma, y solo oímos trinos de pájaros y grillos, al fin después de un descenso vamos a parar al embalse de Palmaces con unas vistas increíbles de la zona, en la misma presa charlamos con un ciclista, que nos explica lo que nos queda y nos da algún consejo, como que el sendero del río si nos dice que lo pasemos no hacerlo hasta el último momento, hay senda aunque no lo parezca a cada lado del río, nos aconseja una foto a la bruja en la roca de la montaña solo retrocediendo un poco. Junto al embalse almorzamos algunas barritas que llevamos.

Señal del camino y nuestro medio de transporte

Embalse de Palmaces
  Cruzamos el primer puente muy estrecho sobre el río y pasamos por la senda dejando el río a la izquierda, vamos por la senda sin pérdida, con alguna parada para pasar sobre algún tronco en el camino hasta que el camino se aleja del nuestro y cruzamos el río por un paso con piedras hasta una pista buena, aquí ya aprieta el calor y nos embadurnamos de crema solar, llegamos a Pinilla de Jadraque, de nuevo en la ruta del Camino del Cid.

  Desde Pinilla vamos por carretera ya que el camino nos desvía y vuelve a la carretera constantemente, de Medranda en adelante vamos alternando caminos y carretera hasta llegar a Jadraque, aquí encontramos la oficina de turismo y sellamos el pasaporte, junto a ella hay una habitación que simula en la que vino a este lugar a descansar Jovellanos, con un cuadro suyo y alguna pintura más, en las inmediaciones tenemos a la izquierda haciendo esquina el Bar Alto Rey en el que comemos un par de bocatas y nos llevamos otros 2 para el camino,(16,60€), en la esquina derecha una tienda de ultramarino que nos abastece de agua fría y algún plátano.

Castillo del Cid, en Jadraque
  En esta población podemos ver el famoso castillo del Cid enorme junto al pueblo, salimos por la carretera hasta el desvío a la izquierda que nos lleva por un camino en no muy buen estado, en el que ascendemos poco a poco hasta parar, una subida de casi 1km a pie, hay una fuente a la mitad de subida con agua cristalina y fresca que ayuda en la escalada a pie, una vez arriba giramos a la izquierda y tenemos un descenso muy prolongado hasta llegar a Bujalaro, pueblo con fuente y Bar enfrente junto a la carretera e Iglesia, seguimos por caminos rurales hasta llegar a un camino junto a las vías del tren que nos llevará hasta Matillas.

Señal del Camino, indica la anterior y la siguiente población y distancia
  De Matillas seguimos un camino rural en buenas condiciones paralelo al canal de Mandayona, hasta Vilaseca de Henares y luego paralelo al río Dulce hasta Mandayona, aquí en un banco a la sombra junto a la carretera y al Bar Agustín damos cuenta del segundo bocata y bebida del Bar fría para recuperar fuerzas.

 Hasta Aragosa por caminos rurales con campos de cultivo a nuestra vera, aquí compramos agua fría para llegar hasta el fin de etapa del día en una tienda local, se inicia la zona más bonita del día el paso por el Barranco del río Dulce por un cañón calcáreo, a un lado llevamos el río Dulce de agua cristalina y al otro las rocas del barranco, aquí encontramos a alguna pareja con niños de paseo, y algún caminante, todo esto con buitres revoloteando en lo alto, una vez llegamos a la Cabrera, nos desviamos para seguir la alternativa ciclista del camino por la izquierda del río junto a una acequia, y campos de cultivo, hasta la parte baja de Pelegrina con un castillo impresionante en su colina, aquí está el desvío de la ruta del Quijote que queda a nuestra izquierda, en un camino que asciende la sierra, nosotros optamos por seguir este camino, pero para ciclistas lo desaconsejo totalmente, habría que seguir hasta Pelegrina y continuar a Sigüenza por la Gu-118, en la ruta del quijote primero ascenso muy largo, (vimos un ciervo subiendo la colina junto a nosotros), luego el camino es bastante malo para llevar bici hasta casi llegar a la carretera que nos lleva a un par de kilómetros a Sigüenza.

Pelegrina y su castillo

Paisaje cercano al Barranco del Río Dulce

Sigüenza en el horizonte
  Sigüenza con una enorme catedral y un castillo a la par, donde se ubica el Parador Nacional, es un pueblo enorme para lo que hemos visto a lo largo del día, nos hospedamos en Puerta Medina, muy cerca de la catedral, Concha la responsable muy amable, tienen cuarto para dejar las bicis en la planta baja, y habitación con desayuno en la primera planta, nos da una triple porque es la única disponible, más anchos, nos sella el pasaporte, ducha y vuelta a la ciudad junto a la catedral, cena en Don Rodrigo, unas tostas, 4 por cabeza, ensaladilla y 4 tercios, cena estupenda y a la cama.

  Día 2. Sigüenza-Medinaceli. 88km.

  A primera hora la señora del hostal nos deja el desayuno para los que madrugamos más, y muy bien, después de reparar un pinchazo antes de salir, iniciamos el camino hacia el parador, donde comenzamos a circular por un pinar de grandes dimensiones en ligero ascenso hasta Barbatona, aquí cruzamos la carretera y bajamos hasta cruzar el río Dulce y seguirlo unos kilómetros por un desfiladero hasta alejarnos para ir a Jodra, aquí cruzamos de nuevo el río por la carretera y nos desviamos a la derecha para ir por un camino junto campos de siembra y sotos del río, antes de llegar a Estriégana abandonamos la cercanía del río para ir por camino de buen firme hasta la población que al inicio nos hace girar a la derecha y ascender por un camino de herradura en no muy buenas condiciones, pero ciclable con cuidado hasta el ascenso final que nos lleva hasta un enorme encinar que durante varios kilómetros seguimos en muy ligero ascenso, oímos disparos de caza, es domingo, y vemos un venado que sale corriendo entre los matorrales, magnífica estampa, descendemos hacia un camino que nos lleva en línea recta hasta Alcolea, junto a la carretera en un banco junto a una fuente descansamos, comemos barritas y frutos secos y preguntamos por una tienda y nos dicen que visitemos la casa de piedra de la población y frente a ella un supermercado para reponer agua.

Dejando el desfiladero del río Dulce

Camino del Cid en el encinar tras pasar Estriégana

Casa de Piedra famosa en Alcolea
  A la salida del pueblo las señales y el track que seguimos nos desvían a la derecha por un camino que cruza la A2 por un paso subterráneo y nos conduce hacia las vallas de las vías del AVE, al seguir unos metros vemos que las vallas nos rodean y no tenemos paso, vemos las marcas del camino al otro lado de la rotonda, así que desandamos un poco junto a la salida de la autovía pasamos bajo está, por un paso de agua, cabemos perfectamente con bici y volvemos a subir hasta la salida, a pie, continuamos el camino, desde aquí entre campos de cultivo vamos pasando Garbajosa, Aguilar de Anguita y Anguita, aquí otra zona de paisaje inolvidable por caminos de buen firme y poco transitado vamos junto al río Tajuña y nos adentramos en una zona que junto al río hay enormes cuevas en la roca a nuestra izquierda, hasta que el paisaje se abre para llegar a una zona de cultivo de nuevo hasta Luzón, aquí iniciamos el ascenso por carretera (ya que el camino no es ciclable al 100%) hasta casi hacer cima y nos desviamos a la derecha por un camino entre los molinos eólicos que va ascendiendo en menor medida hasta enlazar con el camino cuando ya a la vista tenemos a Maranchón en la lejanía, desde aquí todo descenso.

Aguilar de Anguita

Anguita

Cuevas junto al río Tajuña
   Mención aparte merece el tema de la comida en Maranchón, al primer lugar que vamos es la Fonda Bueno, con mesas a la sombra y dentro lleno (parece que son fiestas y está a tope), pedimos unas colas y algo de picar y para comer nos dicen que está todo reservado por fiestas y que no nos sirven, solo las bebidas y una tapa, (¡Que fuerte!) hablamos con una joven que nos dice que acaban de bajar o subir a la Virgen y que es la hora de reponer fuerzas, nos recomienda que vayamos al otro bar del pueblo, no hay más, que ya se estará despejando, efectivamente, el otro bar Marcos junto a la carretera y frente al surtidor de gasolina, con mesas en la sombra del parque nos atienden de maravilla, rápido, amable y económico, sepia a la plancha, lacón y patatas con refrescos y agua para llevar por 26€, no nos lo acabamos todo.

  Descanso y salida por la carretera a Arcos de Jalón que seguimos en ascenso hasta pasar los primeros molinos eólicos y seguir las rectas interminables, pasamos el límite de provincia de Soria hasta girar a la izquierda por camino vamos bajando hasta Layna, cruzamos el pueblo hacia el Norte y a la salida, tenemos un dilema seguir el track a la derecha o las señales a la izquierda, optamos por las señales a la izquierda y, erramos, el camino se vuelve invisible y debemos pasar por una zona de hierbas altas a pie varias decenas de metros, luego camino malo hasta enlazar con el que no cogimos a la derecha antes, continuamos cerca del río Blanco a nuestra derecha.

Carretera de Arcos de Jalón y molinos eólicos

Fuente y cascada en Arbujuelo, junto al camino asfaltado

 En Urex de Medinaceli comienza un ascenso por asfalto sin tráfico de unos 3 o 4 km que llega a hacerse largo para cruzar las vías del AVE por un túnel y luego pasamos a un camino de buen firme que desciende largo y tendido hasta Arbujuelo, con una cascada de agua junto al camino asfaltado que nos lleva a la carretera, aquí optamos por no seguir el camino del Cid y continuar unos kilómetros asfalto, ya vemos Medinaceli en lo alto de la colina, vemos Salinas de Medinaceli, salvamos la A-2 por encima y las vías del tren en una gran curva para ir hacia la Estación, aquí nos tomamos un refresco antes de la subida final a Medinaceli, son 4 km de ascenso pero que con calma todo llega.

Salinas a la izquierda y Medinaceli en lo alto de la colina

Mercado medieval de Medinaceli en la plaza mayor

  En Medinaceli, hay feria medieval y la población está llena de vehículos aparcados por donde pueden, vamos hasta el Hotel Bavieca, sello y alojamiento, con cuarto para dejar las bicis, nos aseamos y paseamos por el medievo en este pueblo encantador y encima con feria medieval, en un entorno a la medida del mercado, vamos hasta el Arco romano, único de tres arcos en España, vistas de todo el valle por el que hemos bajado hasta Medinaceli. Cenamos en un bar pegado al Bavieca, no queda mucho por las fiestas, y nos preparan ración de jamón serrano y queso, y la tortilla que les queda acompañado de papas fritas (16€) vemos un poco el FC Barcelona- Málaga y nos vamos a descansar.

  Día 3. Medinaceli-Calatayud. 102 km.


  En Medinaceli a las 8 de la mañana hace un fresco que quita el hipo, nos colocamos el cortavientos e iniciamos el descenso, el camino del Cid a pie, gira a la derecha para cruzar la carretera que va a Almazán, pero como la hemos visto en obras y esta parte no es ciclable al 100% optamos por bajar por la antigua N-II, con poco tráfico hasta conectar con el camino.
  En una gasolinera de la Estación reponemos agua, y sellamos en Lodares en un bar de carretera, continuamos por la N-II junto al río Jalón hasta Somaén, aquí pasamos un puente sobre el río, cruzamos el pueblo y seguimos las señales junto a la vía del tren por caminos rurales, hasta Arcos de Jalón, aquí hay un mercadillo, nos acercamos al Ayuntamiento donde sellamos el pasaporte y seguimos camino hacia Aguilar de Montuerga, al principio por asfalto y como vemos que al coger el camino más adelante, nos vuelve al asfalto, decidimos seguir por carretera, y más cuando vemos un desvío a Montuerga de Soria que seguimos, ya a la entrada del pueblo, conectamos con el camino del Cid de nuevo, en la cima los restos de un antigua castillo o fortaleza que parece fue enorme.

Salto de agua junto a la N-II

Somaén, saliendo del pueblo por caminos rurales

Al fondo Montuerga de Soria y a la derecha Aguilar de Montuerga

  Una vez cruzado el pueblo iniciamos en ligero descenso por caminos rurales la ruta hasta Santa Mª de Huerta, un pueblo junto a un enorme Monasterio, pegado al río Jalón, aquí buscamos el Ayuntamiento para sellar el pasaporte y reponemos fuerzas con alguna barrita de cereal y frutos secos junto al Monasterio enorme, continuamos camino ahora por asfalto en ligero ascenso unos kilómetros hasta un desvío a la izquierda que nos lleva por caminos de buen firme, junto al que de vez en cuando, vemos unas cruces tumbadas junto al camino de grandes dimensiones, imagino que una especie de vía cruces o romería hasta el Monasterio anterior.

Monasterio de Santa Maria de Huerta
  Llegamos a Torrehermosa pequeña población que pasamos junto a la Iglesia para iniciar un ligero descenso por camino rural, y paisaje más desértico, en el que llegamos a ver un zorro que al vernos se sube a lo alto de la colina, unos metros por asfalto para de nuevo llegar a un camino rural de buen firme que nos llevará a Monreal de Ariza y posteriormente a Ariza, descanso junto a un parque, sellado en el Ayuntamiento y comida en el Bar Toño, muy amable y presto en atendernos, plato combinado de patatas, huevo, y lomo a la plancha, y jamón y queso para dos, agua para llevar y refrescos por 29,5€, y a la sombra en la calle muy tranquilos.

Torrehermosa
Zona más desértica donde vimos un zorro

Ariza, vista frente al Ayuntamiento

  Volvemos al puente romano sobre el Jalón para continuar por caminos rurales 100% ciclables, el paisaje son campos de cereal constantemente, hasta llegar a Cetina que cruzamos, no se ve un alma por las calles, seguimos los caminos rurales ahora más cerca de la vega del río, poco a poco nos acercamos a las vías del tren hasta llegar al barrio de la Estación y luego a Alhama de Aragón con sus famosos balnearios y su torre medieval, sellamos en el Balneario de Alhama de Aragón, una pareja de cicloturistas nos pasa, ellos empezaron en Guadalajara y llevan 4 días de pedales, nos despedimos y continuamos ahora junto a río en un recorrido sinuosos entre el río Jalón y las vías del tren, una vez pasamos bajo las vías del tren salimos a la N-II, por asfalto, evitando un par de túneles por la derecha, llegamos a Bubierca.

Camino serpenteando junto al río
Bubierca en la N-II

  Aquí el sendero no es lo ciclable que quisiéramos y seguimos por asfalto hasta un kilómetro antes de Ateca, hay poco tráfico y se va cómodamente por el árcen, aquí pasamos un puente sobre el río y enlazamos la A-1501 una estrecha carretera que nos lleva en poco tiempo a Ateca, junto a la fábrica de Hueso, y tras pasar el río Jalón por una pasarela, descansamos en unos bancos junto al cauce del río. Merendamos y nos refrescamos con las últimas barritas que llevamos.

  A la salida de la población junto a una ermita sigue el camino, que nos lleva junto al campo de fútbol, aquí hay que bajar de la bici par subir unas escalera, y de nuevo camino primero junto a una zona de pinar a nuestra izquierda y luego de cruzar la carretera junto a campos de frutales, peras y manzanos sobre todo,  luego continuamos por el camino de servicio junto a las vías del AVE, hasta llegar al cruce de caminos, unos siguen a Munébrega, la primera etapa de Las tres taifas, del Camino del Cid, y otros seguimos las vías del tren hacia Terrer para acabar en Calatayud.

Ateca

Río Jalón a su paso por Terrer

  En Terrer buscamos la Posada del Cid, junto a la carretera, para sellar el pasaporte, pero la señora dice que está a la espera de recibirlo, seguimos de vuelta al río cruzando por la parte baja del pueblo, de nuevo por caminos de servicio junto a las vías del tren por un largo trecho, cerca de Calatayud, dejamos el camino junto a las vías y vamos por caminos de asfalto acercándonos a la población, el camino no nos deja coger asfalto en lo posible hasta casi tocar Catalayud, aquí al inicio preguntamos por el Hotel Fornos y nos indican la cercanía, muy bien atendidos, con lugar para dejar las bicis en un patio interior del Hotel, habitación reducida pero cómoda, nos sellan el pasaporte, cenamos en las inmediaciones Café Roma, bocata de bacon y pimientos con queso y sandwich vegetal con cervezas 11€. Descanso merecido en nuestro último día, por la noche concertamos la vuelta a Atienza,  con un servicio de taxi que pueda llevar un par de bicis, con un teléfono que nos facilitaron en el Hotel Bavieca de Medinaceli, con la empresa de taxis de Calatayud todo eran problemas y no podíamos reservar para el día siguiente.

  A la mañana siguiente sobre las 9.30h puntual, la señora, que nos llevó con una furgo, sin dos de los asientos de atrás, para llevar las bicis, ya lo habían hecho en otras ocasiones, muy bien, todo correcto, antes de las 12 en Atienza cargamos las bicis en el coche para volver a casa, y aquí damos una vuelta para que nos sellen el pasaporte, pero la oficina de turismo sigue cerrada por fiestas (ya es martes) y en el Hostal El mirador, nos sellan, y cuando vemos el sello, resulta ser el del Hostal no el del camino, bueno al menos tenemos algo de Atienza, compramos algunos dulces para la familia en un horno local e iniciamos la vuelta.

  Saludos y a pedalear.

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